Aprender a emprender
Gestión de proyectos
Primera parte
Actitud del emprendedor
1. El valor moral del progreso
No hay nada que los hombres en su conjunto no consideren más valioso que el sentido del progreso. El valor moral del progreso, es una verdad verificable, no es una expresión de nuestros sentidos o actitudes. Esta proposición tiene una naturaleza limitada a lo que entendemos por progreso. El diccionario de la Real Academia Española, refiere a la “acción de ir hacia a delante; avance, adelanto, perfeccionamiento”, es decir, expresa un cambio, que representa un avance a un nuevo estadio de virtud, un logro más en el conocimiento. Es algo gradual con valor ético, dentro de la búsqueda de ámbitos alternativos para participar en la economía de desarrollo, es decir, aquella en la que se es un ciudadano que promueve una sociedad abierta, justa y solidaria con el medio ambiente.
Muchos asumen que la racionalidad es fundamental para el progreso. La razón puede indicarnos cómo conseguir lo que queremos, pero nuestro básico y deseo están más allá del alcance del razonamiento. Por ejemplo, podemos captar la verdad en 1 + 1 = 2, y asumimos que tenemos razón en esta proposición, pero no hemos defendido la verdad dentro de un contexto de interés evidente que permita su patrocinio en términos de objetividad ética. Un argumento importante para dotar de valor ético al promover las ideas de progreso, es el hecho de que las personas discrepan profundamente sobre el bien y el mal, y este desacuerdo se extiende como fractura de fracaso, al evaluar a las ideas objetivas propuestas como no viables, precisamente por la falta de objetividad ética sobre sus efectos en la sociedad. No se trata de justificar su utilitarismo, sino la existencia objetiva de un camino, uno que sea justificado éticamente, es decir, hay muchos caminos para subir a una montaña, y algunos de ellos no son éticos.
¿Hay progreso moral ahora mismo en las sociedades? Después de dos guerras mundiales, guerras comerciales, violencia urbana creciente, intolerancia, destrucción del medio ambiente, crimen organizado, desfalcos financieros, criminalización de indocumentados migrantes, los derechos de igualdad de genero,…, durante el siglo pasado y en el umbral del presente, la creencia de que estamos avanzando moralmente se ha vuelto difícil de defender. Sin embargo, hay más a la pregunta de casos extremos de degradación moral. Por tanto, tal vez podemos juzgar progreso moral, preguntando qué tan bien hemos hecho la tarea de emprender empresas responsables con el medio ambiente y el sentido de progreso moral para las sociedades.
Las palabras tienen consecuencias, y lo que una generación puede creer, dice mucho de la aceptación pública de ideas de progreso, por esta razón, debemos lograr avances concretos en términos éticos. Emprender un proyecto es cerrar la brecha entre la retórica y la realidad ética, dado que vivimos en un mundo que contiene una gran cantidad de dolor y sufrimiento.
Progresar es responder al qué hacer con nuestra vida, cómo elegir y qué decisiones se deben tomar. Ser emprendedor, es construir un camino de progreso, además, sin definir un diseño de vida, es muy fácil perdernos en este acelerado mundo. En absoluto nadie nace con este diseño, cómo conseguir un empleo y qué hacer con el resto de nuestra vida, no es una tarea fácil de bosquejar este proyecto. Dos errores son comunes, elegir la empresa en función de las calificaciones escolares y asumir como ley, que casi todos los egresados emprenden sus carreras laborales en algo muy distinto a lo que fueron formados.
Hay quienes logran todo lo que pensaron para su vida, pero esas personas no se observan extasiadas por tal logro, investigando un poco más, son ellas continuamente las que modifican su proyecto de vida para hacerlo más emocionante y progresista[1]. Muchos somos quien despertamos todas las mañanas con la imagen del éxito y vamos a la cama cada noche con un nudo en el estómago, sintiendo como si algo faltara, algo que se perdió en el camino. ¿Sientes que tienes todo el potencial, pero al mismo tiempo sientes que nada logras? Más grave aún, es equiparar con simetría el hecho del éxito con ser felices, cuando la verdadera felicidad está en el viaje de diseño y rediseño frente al cambio de escenario continuo de los tiempos modernos.
Pensemos en alguien exitoso de típica clase media que durante más de treinta años aportó en un mismo trabajo. Su casa está casi liquidada en su hipoteca. Sus hijos se han graduado de la universidad. Sus fondos de jubilación se habían invertido cuidadosamente para su tranquilidad. Él tenía una carrera sólida y una vida familiar y personal sólida. Levantarse antes de la luz del sol, ir a trabajar, pagar las cuentas, ir casa por la noche y descansar en cama. Despertar al día siguiente y hacerlo todo otra vez. Repetir esto durante años. Este individuo se había hecho la misma pregunta una y otra vez. Él llevó esta cuestión con él a las platicas de café, a la iglesia y a uno que otro bar, buscando respuestas de sí lo que vio frente al espejo de los días, fue lo que deseo para su vida. ¿Por qué estoy haciendo esto de mi vida? Al mirar hacia atrás en el espejo nunca tuvo una buena respuesta. Él había sostenido que ser responsable y exitoso en el escalafón podría hacerlo muy feliz, pero en ese corte de caja vivencial, al modo de Hamlet de Shakespeare, reconoce no ser suficiente, su creencia se volvió disfuncional, dejo de parecerle que lo hecho resultó una vida emocionante. Si solo el hombre de aquel espejo le hubiera dicho que estaba solo y que él es el único responsable de hacer de su vida un significado personal de progreso continuo y de impacto social. Probablemente la respuesta de por dónde comenzar, no hubiera llegado tarde para hacer grandes cambios, tomar riesgos y creativamente haber desarrollado sus capacidades para empoderarse de esas emociones que representan la creatividad de emprender con audacia, basadas en el conocimiento, tales empresas de lo más excitante para un hombre en soberanía intelectual.
La creencia que nos vuelve disfuncionales para la felicidad, es creer que siempre es demasiado tarde para emprender el progreso ético en nuestra sociedad. Diseñar o mejor dicho rediseñar nuestra vida, es una suerte provocada por la educación basada en gestionar grados crecientes de mayor conocimiento. Avanzar en el conocimiento por cuenta propia, es la mejor empresa, ser emprendedor es apostar al progreso ético, y los grandes problemas en la sociedad son las más grandes oportunidades para el éxito; reconocer, evaluar y justificar la existencia de un problema, es solo el principio de una vida exitosa, el propio Jorge Luis Borges sostenía que la felicidad, es el resultado de tocar puertas, y es la puerta la que elige.
Mire a su alrededor. Busque en su hogar, esta lleno de cosas, teléfono celular, luminarias, muebles, motores,…, todo fue soñado, reconocido como problema, y diseñado como empresa de progreso a partir de documentar en lo profundo del conocimiento un problema. El problema es escuchar a la literatura y construir las razones objetivas de su existencia. Los problemas son por eso la corriente del éxito de todo emprendedor. Todo lo creado por alguien, es el esfuerzo y la evidencia objetiva de que resistir a todo revés es necesario en toda actitud emprendedora. Hay una diferencia entre problemas asignados por otros, y problemas atendidos y reconocidos emocionalmente por nuestra persona, tocar puertas nos exigirá convencer patrocinadores, socios y amigos, es aquí donde el liderazgo es dado por el conocimiento y no por la ingeniería de negocios que pudiera desprenderse en principio. La investigación basada en revisiones de literatura técnica o científica, es una buena aproximación a la viabilidad de justificar objetivamente un problema, o podríamos llamarlo una puerta de oportunidad para la felicidad del emprendedor.
La solución requiere de muchos prototipos, ensayos experimentales, acumular experiencia en el equipo de desarrollo, acumular datos en el proceso de diseño, ajustar variables para acercarse a los objetivos de solución. Una vez que se alcanzó a crear una base de conocimiento solida, estaremos en condiciones de tocar puertas, es aquí donde Usted como emprendedor tendrá que dominar un discurso coherente, con la empatía racional necesaria para seducir a sus patrocinadores.
Lograr la estética y racionalidad del discurso para emprender, nos da una cara más solida, rigurosa y audaz para vender un cambio de rumbo, sin duda, es trabajo de diseño de una solución basada en fundamentos sólidos. La estética es la manera de ver los problemas como una oportunidad de progreso ético. Por otro lado, cada empresa es sensible a los problemas de sobrevivir en el mercado incorporando innovaciones, esa sensibilidad es la puerta a escuchar los planteamientos del problema de los emprendedores. Ser emprendedor, es asumir una actitud de pensamiento riguroso, sensible a oler el futuro, a ser audaz en asomar su conciencia al movimiento de frontera empresarial. La mejor forma de ver y oler la frontera, es investigar exhaustivamente todo acerca del contexto de un problema. El proceso de investigación en cierto modo, es la mejor manera de ganar confianza estética para enfrentar los problemas. Esta estética implica emoción humana, y hemos descubierto que cuando se trata de emociones, el pensamiento de diseño ha demostrado en nuestra experiencia, ser la mejor herramienta para dotar de energía en la empresa que pretende abrir las puertas de oportunidad. Muchas puertas se cerraran, pero seguramente hay una que lo elegirá, con cada fracaso, su perfil estético, le dotará de la semántica y de los fundamentos para seducir a la razón y la emoción de sus patrocinadores.
Jamás diseñar nuestra vida es una meta clara, y a nuestro alcance inmediato no está, implica invertir en reconocer los problemas con profundidad y reconstruir nuevos conceptos (ideas) como forma de dar seguridad de éxito a problemas duros, sobre opciones que muy seguramente cuanto más objetivas y originales sean, más probabilidad tendrán de ser patrocinadas. Cuidado, cuando Usted siente que tiene un resultado deseado sin haber agotado la revisión del problema. En este caso, es casi seguro que no habrá ninguna solución clara, es cuando Usted es autovíctima de ocurrencias locas, improvisadas, y está construyendo su camino no hacia delante, sino sobre un espejismo en que está convencido (enajenado), de que sus ideas conducen a líneas armoniosas de enfrentar la oportunidad que representa un problema.
Todo lo que hace nuestro diario vivir, es dejarnos ver con una mirada atenta y con esfuerzo honrado los problemas a resolver y algunos de ellos son claros candidatos como proyecto de vida. Resolver emprender algún problema para nuestra vida, la hace más placentera, productiva, y en alguna parte de nuestra historia, será una pasión de un jugador serio y alegre, sin importar donde nos fijamos en nuestro mundo externo, esto lo podemos ver cuando pasa en los diseñadores creativos que han afrontado problemas objetivos.
Al profundizar en el conocimiento sobre un problema, veremos los beneficios de este pensamiento para con nuestra emoción existencial. El diseño no solo funciona para crear cosas como ordenadores y edificios, trabaja en la creación de nuestra personalidad. Pensar el diseño de nuestras vidas, es con alegría ganarse un lugar importante en la sociedad desde la actitud de enfrentar los problemas. No importa si son o fueron, los problemas hacen que ganemos propósito en la vida, algo así como jóvenes de edad perpetua utilizando su creatividad en audaz combinación pensamiento-conocimiento-tecnología, para crear un discurso estético con el potencial de lanzarnos como líderes con la capacidad de sorprender gratamente a nuestra comunidad. Una vida bien diseñada, es un proyecto en continuo rectificar en términos de mayor conocimiento y experiencia.
¿Qué sabemos?
Todo comienza brindo los ojos al mundo, enseguida descubrimos una emocionante trayectoria de un tiempo dirigido en una sola dirección, como niños dibujamos sueños sentados frente a hojas de papel, cada paso descubrimos sorpresas heredadas de tantos emprendedores que soñaron otra realidad, de niños cada día somos diseñadores de innovaciones multidisciplinares, pero la educación pronto nos siembra miedos y pone en marcha una conspiración contraria al aprendizaje de procesos de pensamiento creativo. En nuestra carrera escolar hemos vivido la automatización de la enseñanza y la gratificación de una calificación sobre los hechos de nuestra capacidad creativa. De niños no tenemos muy claro lo que haremos de adultos, continuamente cambiamos de rumbo cada vez que nos hacemos de nuevo conocimiento, pero es precisamente este el ritmo de vida de los emprendedores al diseñar sus propios caminos. El conocimiento deconstruye nuestro diseño de vida, lo fractura y hace inmediatamente que surja una nueva impresión de nuestras pasiones. Después de un inicio muy duro, en una educación mecánica de instrucciones, antes que de reflexiones, es que ese niño creativo todo lo empieza ver difícil y se contamina de los miedos de los adultos.
Encontrar nuestra vocación, es elegir problemas a resolver. Es el proceso de tratar de encontrar una manera de concebir una visión de carrera personal significante, el emprendedor, es un individuo en ajuste creciente de su vocación dentro de un universo para resolver problemas objetivos. Cuando se resuelve bien un problema a la vez, ganamos confianza, y nos reconocemos importantes para nuestra sociedad. No se confunda con los problemas escolares, estos dejan mucho de ser en realidad los mismos de la sociedad, dado que casi siempre se intenta enseñar una solución a lo que ya fue reconocido, reflexionada y analizado como problema mucho tiempo atrás. Y es por eso por lo que todos comienzan a sentir aburrimiento de las matemáticas cuando estas se presentan como una serie infinita de procesos algorítmicos irreflexivos.
Formar a un emprendedor, es eliminar lo disfuncional creativo, eso perdido en la educación básica, eso que anuló la curiosidad y la perseverancia por imaginar otros mundos posibles. Cualquier estudiante que se aplique en su formación los principios de innovación en el diseño de soluciones a problemas, puede reconstruir una y otra vez, una nueva y mejorada visión de su proyecto de vida, a tal grado de reconocer que siempre hay más vida después de la vida escolar. Descubrir escribiendo sobre la justificación de problemas, se aprende cómo utilizar el pensamiento escrito para averiguar y sorprendernos en las profundidades de casi todo lo creado en este mundo.
Los emprendedores aman integrar el lenguaje a sus ojos que observan la realidad, con una cada vez mayor y diversa batería de preguntas, para la analítica de problemas. De esta manera, al vernos al espejo podemos siempre medianamente contestar provisionalmente: ¿por qué estoy haciendo esto de mi vida? En este ir y venir al espejo de nuestros días, podremos al modo de William Shakespeare, hacer un viaje a los propios infiernos de Hamlet y encontrar nuestra vocación, es decir, la puerta es la que elige.
Ser emprendedor es responder ante ese espejo en el día a día estas preguntas:
¿Cómo puedo enamorarme hasta agotar mi existencia, en el desafío de resolver determinados problemas?
¿Cómo actuar éticamente en el progreso de mi sociedad?
¿Cómo equilibrar obligación con libertad creativa?
¿Cómo hacerme de una escritura para pensar profundo en los problemas?
¿Cómo puedo lograr traer una idea relevante a este mundo?
¿Cómo puedo colaborar en los sueños de otros para lograr los propios?
*¿Cómo lograré ser el más adinerado y deseado por las masas?
Esta última pregunta *, es la única que los falsos emprendedores se hacen, porque de hacerla, quiere decir, que ya viven solo de sus glorias pasadas. A los niños se les pregunta ¿qué quieres ser cuando crezcas?, pero casi nunca se les educa para crecer en libertad creativa para alcanzar esos sueños. Sin duda alguna, la lectura de literatura específica es el manantial creativo de ideas, y sin duda el instrumento más poderoso de que dispone la sociedad para hacernos de nuevos líderes bajo la base de disponer del conocimiento en la frontera para el futuro. ¿Dónde encontrar el pensamiento de los diseños de lo que nos rodea?, todo está en la literatura, comience por leer en grados de menor a mayor complejidad sobre todos los problemas que sienta curiosidad. Averigüe cómo dejaron de serlo y se convirtieron en teléfonos inteligentes, tabletas, hornos de microondas,… De estas lecturas, podrá entablar conversaciones con gente relacionada con el ámbito del problema, ganar empatía, y esa misma gente colaborará con Usted, sugiriendo nuevas lecturas y tecnologías. Si se encuentra con alguien que le intente detonar miedo en su interior, aléjese prudentemente, a una distancia igual al número de libros necesarios de leer para ganar confianza en la visión que Usted tiene de un problema.
Al defender nuestros puntos de vista con fundamento en conocimiento, se agudizará su rigor en las lecturas, de entre muchos autores Usted reconocerá la creatividad en ellos. Las ideas sobre un problema solo serán relevantes si somos capaces de ver al problema en lo más profundo de sus implicaciones. Aquí aseguramos, que un emprendedor no puede lograr serlo si no es un lector reflexivo y creativo dentro del universo de la literatura. La literatura es un medio para darnos un golpe de “suerte” en la justificación de un problema. Reiteramos, que leer es el ánimo de curiosidad de un niño, es hacernos exploradores de nuevas posibilidades a los problemas estudiados. Al leer, veremos desde distintos ángulos, volveremos a pensar de una manera nueva, rediseñando la experiencia previa, de no leer, quedaremos a la deriva creyendo que planetas, estrellas, átomos, moléculas, galaxias y todo el polvo cósmico se alineen en conspiración para fracturar nuestro éxito en la vida.
Aquí está ya claro que nuestra existencia, no puede ser perfectamente diseñada de una sola vez y para siempre, es algo reconstruible en términos de aprender a pensar más riguroso, y gustar con placer ético, continuamente en términos del conocimiento gestionado, un nuevo diseño de vida. No tener un diseño, es estar extraviados en el aburrimiento y sin esperanza, tenerlo es la experiencia capital de todo emprendedor. La vida del emprender es crecimiento y cambio. Nada en él es una idea estática. No se trata de responder a la pregunta de ¿qué hacer con nuestra vida de una sola vez y para siempre?, nadie sabe realmente lo que ella quiere ser. Incluso aquellos que marcaron la realidad con sus ideas para siempre en nuestra vida, tales como Tesla, Einstein y otros de esta talla, jamás dejaron de reinventar sus ideas, a cada paso de su camino, ese espejo les reveló nuevas alternativas creativas, y de este modo, condujeron sus vidas como una forma de progreso hecho de amor por la humanidad.
Ser emprendedor, es rediseñar en cada día el camino a seguir, confiando en ser más astutos en la forma de pensar y hacernos de conocimiento como ventaja competitiva. Aprender a pensar al escribir, le ayuda a Usted, a tener una vida emocionante, llena de seductores desafíos y con la energía de pararse una y otra vez de sus errores. La vida del emprendedor es un movimiento por caminos que generalmente nadie los ha explorado, en la juventud, es cuando más valentía se nos da para abrir brechas de conocimiento en donde nadie nunca ha ido a explorar. Imaginar cosas que no existen aún, luego de construirlas, entonces cambia el mundo. Hacer esto, convertirnos en emprendedores, es asumir la creatividad como modo virtuoso de vida. Usted puede construir el futuro haciéndose de conocimiento nuevo cada día y como resultado la vida va a cambiar para Usted lo aseguramos con rigor. Sí su vida es bastante perfecta como es, seguramente la creatividad no la ha vivido, simplemente esta última es la inspiración que le ayudará a hacer más emocionante la existencia, sorprendiéndole aún más la vida que ama actualmente. De sorpresas esta hecho el camino del emprendedor. Cuando vive Usted como un emprendedor, está dispuesto a preguntar por lo más profundo del conocimiento, esa es la curiosidad, el ingrediente fundamental del emprendedor.
Aprender a pensar como un emprendedor, es dejar de ver el camino como una única flecha hacia adelante. Los emprendedores son personas que exploraran sin prejuicio todas las relaciones en el mundo, es decir, considerará divertido el proceso de exploración de todas las vías posibles que implican un método creativo. Ser emprendedor, es la diferencia entre tener un trabajo que diariamente es apasionante y lo que es "vivir" una rutina hasta llegar el momento de morir. Esto puede parecer algo dramático, incluso que no es así, pero muchos argumentan que aprender a pensar diferente es fundamental para que la vida sea emocionante. La curiosidad le da alegría al niño y al adulto, colaborar en el diseño de nuevas ideas, es aprender a modificar procesos creativos. Ser curioso crea lo nuevo, invita a explorar, sobre todo, ayuda a obtener la buena fortuna de los emprendedores. Es la razón por la que los emprendedores ven oportunidades en todos los rincones de la realidad. Probar nuevos procesos creativos, es la predisposición a la acción comprometida con la construcción de nuestro proyecto de vida. No hay tiempo para descansar, siempre es tiempo para probar cosas nuevas. Creando ideas de cómo funcionan las cosas, y cómo se podría hacer para que fueran diferentes. Esto replantea el problema provoca despegarse del método tradicional de referencia, implica remover por nuevos fundamentos al método de referencia, en resumen, abriendo nuevos espacios de solución. Cuando la vida se presenta complicada y cada paso que damos, es como si diéramos dos hacia atrás, es que estamos en un error, es momento de dejar ir esas ideas que parecieron buenas, nada de lo nuevo existiría si los emprendedores en algún momento no hubieran abandonado ideas tóxicas. Centrarse en el método del proceso creativo, es ver lo que está más allá de este, es decir una invención.
Pedir ayuda, es la mentalidad más importante del emprendedor, especialmente cuando se quiere una idea radical que implica habilidades y conocimientos diversos. Colaborar con otros es avanzar más rápido, leer más literatura sobre el proceso creativo, es avanzar más rápido. La ayuda al emprender viene por vía doble, por colaboración y por ser autodidacta. Ser emprendedor es un proceso de colaboración, muchas de las ideas vendrán de las discusiones entre colegas emprendedores, la vida del emprender es un camino en colaboración ética sobre cambios en la realidad. La inspiración de un colega debe ser nuestra inspiración, de allí surge la pasión que es el pegamento de la colaboración.
La experiencia es contundente, la colaboración es un rico y dinámico proceso entre las personas; es una vida en evolución de compromisos. No es un rígido juego de cómo hacer algo en equipo. Es un acto creativo para descubrir cómo interactuar con las personas, de tal manera que ideas emergentes que surgen en el devenir del emprendedor, se pongan en acción en colaboración. Colaborar trae confianza en la acción a favor del liderazgo. Como líder de sus sueños, considere que los grandes logros de la humanidad fueron en colaboración: la exploración del sistema solar, teléfonos inteligentes, Internet, las revoluciones científicas, las luchas por la libertad y los derechos. Al hacerlo, el hombre trabajó junto con otros, tuvieron una visión compartida y lograron lo que hubiera sido impensable solos o separados. Debido a un esfuerzo de colaboración lo increíble sucedió. Esta es la magia de la colaboración.
La colaboración es la soberanía social para impulsar su propia agenda en el fondo de beneficios colectivos y también es un buen dato de las personas exitosas, gente con compromiso y pasión compartida. En otras palabras, a través de la colaboración se pueden crear sinergías entre el deseo individual, y los consensos de pensamiento colectivo y los compromisos para solucionar problemas como empresa de oportunidad. Es importante que el éxito no se mida en dinero estéril, sino en el efecto ético de la idea de progreso que impulsa a todo el colectivo que colabora. En su mejor momento, una visión colaborativa desata el mejor ambiente de trabajo, abriendo la tolerancia a la creatividad, la inventiva nos llevará a nuevos servicios y productos, pero sobre todo será progreso en la calidad de vida de toda la sociedad en su conjunto. La visión de colaboración, no solo es estar juntos, sino es la calidad en la forma en que nos relacionamos. Los resultados de lo creado juntos potencía también que estas relaciones alcancen la madurez de emprender cada día más ambiciosas empresas, de las que de manera aislada una persona puede siquiera soñar. Otra ventaja que produce la colaboración es sortear de menor manera las presiones y tensiones propias de los desafíos, incluso disfrutar de ser parte de algo de importancia trascendental.
A las empresas parece preocuparles, cuando sus trabajadores no participan de los desafíos y se muestren aburridos e indiferentes. Estas personas apagadas en su creatividad suelen también tener mala calidad en el trabajo de equipo. El ser emprendedor como modo de vida, hace memorable los momentos en el trabajo, juntos los emprendedores proyectan y surge todo tipo de ideas nuevas que hacen a la empresa competitiva y de progreso moral para su sociedad.
Las personas refieren a la invención o la innovación como algo equiparable. La invención es un proceso de creación de ideas, se elaboran conceptos y demostraciones que dan fundamento a lo que puede funcionar. El proceso de creación requiere imaginar, bosquejar, generar ideas desde la literatura, descubrir vínculos posibles sobre lo ya posible. La invención concluye con las pruebas de aproximación a los efectos reales de la invención. La innovación es lo que sucede después. Por ejemplo, cuando un docente bosqueja ideas, elabora los cuerpos de texto, los edita y publica el libro respecto a su propuesta, es una invención hasta el punto antes de ser publicado. Lo que ocurre después de la publicación es una innovación.
La invención es el proceso del acto de trabajar a través de todos los obstáculos y problemas en el camino de convertir una idea en una empresa. ¿Qué es realmente inventar?, ¿Cómo se realiza un invento?, ¿Cómo podemos aprender de los errores para el éxito de un invento?, ¿Cómo hacer del factor tecnológico una plataforma creativa?, ¿Cómo logra una invención alcanzar a ser una innovación?. Estamos en un momento histórico en el que las nuevas tecnologías están volviendo rápidamente obsoletos los modos clásicos de producir bienes y servicios, es necesario que la educación enfrente el desafío del prejuicio de que toda nueva idea, “surge de un destello de luz que desde el cielo los dioses no la conceden”. La inspiración creativa, no es nada divino, es dotar a las mentes de un entrenamiento intelectual, que las haga soberanas en el manejo de procesos creativos, ya sea en la técnica, la ciencia, el arte o la literatura.
Adam Smith (1776), para el mundo capitalista, observó que hay un tipo especial de tarea que se repite una y otra vez. Gente que inspirada encuentra métodos más y más inventivos, hasta el grado de modificar la práctica laboral, los efectos tecnológicos en la sociedad y los modos de comunicar las ideas. Eric von Hippel (2016) economista, reconoce que un estudiante aprende a imaginar, solo hasta que domina algún proceso de creación, entre repetición y repetición reconoce el método aburrido de su automatización, después de un cierto número de horas, esta frustración es la energía que produce la luz de la creatividad[2]. Este efecto, lo reconoció Hippel en deportistas, obreros, escritores, cirujanos, técnicos,…, todos ellos, primero tuvieron que dominar un método creativo. Lo relevante de este investigador del MIT (Massachusetts Institute of Technology), es que su propia formación antes de ser académico, fue un ingeniero inventor en la rama aerodinámica. El descubrir es toparnos con una idea innovadora, debemos ser detectives de como funcionan las cosas, desde la literatura cavar profundo en el conocimiento, desde la técnica, entrevistar a todo aquel que se le reconozca hábil en el campo. Seguir las pistas una y otra vez hasta armar un método creativo distinto al de referencia. Para Hippel los emprendedores son los que consiguen sortear obstáculos en la imaginación, antes que de habilidad técnica. Este rasgo está presente en la historia de la producción industrial, encontrar un problema como nicho de oportunidad, es identificar en los procesos creativos, la frustración, para paso seguido imaginar ir más allá. Por ejemplo, un científico exitoso, hace esto mismo, identifica mediante revisiones en la literatura, la frustración en modo de problema, en forma de interrogantes abiertas y lo define. Si bien la frustración para los trabajadores es una señal, no es la revelación oculta del problema, esto último es difícil de detectar.
Los inventores poseen además de conocimientos sobre los procesos creativos, un espacio humano con libertad de movimiento para hacerse de nueva experiencia. Este espacio libre es favorable a la norma de compartir ideas entre los integrantes de los grupos de trabajo. Los espacios negativos para la invención son zonas en las que las personas asumen una monotonía en sus procesos, donde los esfuerzos son para producir más sin más esfuerzo por mejorar el desempeño humano y los productos o servicios generados. La mentalidad de los emprendedores creativos, considera ensayar nuevas formas de crear para aspirar a las innovaciones.
[1] SUMMARY B. 2016. Summary of Designing Your Life: How to Build a Well-Lived, Joyful Life (Bill Burnett). CreateSpace Independent Publishing Platform.
[2] SUMMARY B. 2016. Summary of Designing Your Life: How to Build a Well-Lived, Joyful Life (Bill Burnett). CreateSpace Independent Publishing Platform.