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8. Argumentar la realidad


Argumentar hemos expresado, es adentrarnos en la competencia de investigación y el más esencial proceso de esta habilidad intelectual, es sin duda, la integración de datos en forma de proposiciones dentro de cadenas de razón en los argumentos. Los estudiantes de todos los niveles escolares, es común que, no estén familiarizados con esta habilidad de integración de datos bajo la figura del argumento. Normalmente, solo aprenden a clasificar los tipos de datos, refiriéndolos como teóricos o empíricos. Los primeros, son datos surgidos cuando son recogidos de cuerpos de argumentos que abstraen los hechos. Los segundos, son designados al ser recogidos en ensayos experimentales.  Pero podemos generalizar los métodos de argumentar, en tres tipos para su aprendizaje:


La integración convergente de los datos, es un método de analizar ambos tipos de datos, reconciliando sus relaciones, combinando sus efectos y resultados con el fin de que formen cadenas de razonamiento coherentes en sus inferencias,  y que tienen sustento como conjunto de proposiciones que integran un argumento. 


Una secuencia explicativa de pasos de producción de datos y preguntas sucesivas entre los hallazgos, es un método de argumentación de secuencia histórica de las explicaciones, trata de manera sintética los desafíos resueltos y cabos sueltos de la verdad objetiva sobre alguna parcela de la realidad.


Método de identificación de variables o método exploratorio, en el estudio de lo desconocido, es la intervención de categorizar las variables dentro de un sistema de explicación teórico-empírico, volviendo analítico lo causal y la incertidumbre en nuestro razonamiento. Con la intervención de una observación racional por variables significativas, el aprendiz logra intervenir en sus discusiones, apoyado en datos e hipótesis comprobables. En este método, se crea para la realidad observable, un sistema de hechos interconectados por argumentos de explicación. 

 

Aprender estos métodos básicos, normalmente requiere aprender a escribir, interviniendo en discusiones escritas. Este diseño exploratorio convergente, en secuencia, o en la identificación de variables de un sistema de explicación. En pocas palabras, la competencia de argumentar la realidad, es dada a través de juicios durante pasos de integración de datos, consistentes en ganar en cada ciclo de revisión, mayor integración de los datos dentro de una observación racional de la realidad. 


Transformar nuestra manera de justificar nuestras creencias, incluye un marco de aplicación del método convergente de integración de datos, una visión histórica del camino recorrido revelando los hitos científicos y técnicos de los avances del conocimiento. Y no menos importante, sistematizar en variables nuestras observaciones. Si cotidianamente argumentamos de esta manera, el dominio de estos métodos básicos, provocará en el estudiante mejoras significativas en sus habilidades de razonamiento para justificar, explicar, calcular, demostrar, fundamentar sus creencias.


Si evaluamos progresivamente los productos de los estudiantes, materializados como argumentarios y argumentos, podemos objetivamente justificar que recibieron una educación, que les permite ganar poder racional sobre la objetividad con la que expresan sus ideas. Cuando los estudiantes logran la integración de un conjunto de datos bajo la figura de un argumento, se dice que aprendieron a fusionar, explicar, construir e independientemente del tipo de figura del argumento, han logrado hacer suya la habilidad intelectual de justificar y fundamentar sus ideas a la luz de la literatura y la observación experimental. Todo ello, materializado como integración de datos bajo la figura de proposiciones y cadenas de razonamiento.


Marco de explicación y transformación


Al acumular argumentos integradores de datos, el estudiante se hace de marcos conceptuales y teóricos que utiliza en su competencia de investigación y transformación de la realidad. Asumimos que transformar es una suerte de paso seguido de contar con un marco de explicación del objeto de estudio. No podemos transformar intelectualmente una realidad, sin el conocimiento objetivo de esa realidad, este postulado, es necesario para toda aplicación técnica o científica que pretenda transformar su realidad. El estudiante puede utilizar este conocimiento justificado en sus creencias, para consolidarse como líder emprendedor de alguna transformación. Es decir, el liderazgo es el reconocimiento de un poder de conocimiento justificado y fundamentado en el rigor de la integración de datos.


Marcos conceptuales, nos apoyan de la lingüística necesaria para pensar al escribir argumentos. La lectura de la literatura académica o científica-técnica, permite al estudiante hacerse de un argumentario para su comprensión objetiva en el descubrimiento de todo conocimiento. Si bien, todos disponemos de una comprensión intuitiva de la naturaleza, no todos nos creamos un poder racional metodológico, para procesar los datos y justificar nuestras creencias. Es aquí donde la educación tiene su mayor desafío, cuando apunta a aprendizajes serios, rigurosos y la habilitación creativa para generar ideas. 


Modelo de Condit: minitexto


Argumentar es el proceso de elaborar un pensamiento en términos de problema-solución[1], es establecer una postura sobre un problema específico en términos de sus variables. La solución es la hipótesis inferida en forma de proposición, un tipo de frase que afirma sin ambigüedad una verdad. En la definición de texto argumentativo de Tirkkonen-Condit:


"Un texto argumentativo se puede describir como una secuencia en la que la situación de las unidades estructurales puede ser identificada: situación,  problema, solución y la evaluación. Hay secciones de entrada de texto específicas (slots), estado problema inicial y final, es decir, el estado irresuelto y deseable o solución. La sección de evaluación está reservada para resultados de conjeturado de la solución sugerida, es la discusión de lo que sugiere la hipótesis de solución. La sección de la situación está reservada para el material de fondo o estado del arte, es decir, hechos y opiniones que orientan al lector en el ámbito del problema[2]."


Podemos reconocer que en todo texto argumentativo es explícito el estado del arte (situación), problema, solución y evaluación. Este criterio estructural del discurso argumentativo nos permite describir la tesis central que guía el ensayo académico, se trata de un tipo de argumento llamado de tesis o minitexto. La poesía y la ciencia combinan este recurso como superestructura de todo su discurso, es equivalente a decir que tanto ciencia como poesía buscan ampliar los límites de un conocimiento. El minitexto es la estrategia que guía todo el texto en su conjunto, es el eje de la estructura retórica que dota de sentido de coherencia a cada sección del cuerpo total del texto.


La argumentación apela a la razonabilidad, es decir, una evaluación deductiva o inductiva de las premisas que sostienen una conclusión. La definición de argumento en que nos apoyaremos, básicamente se dirige a un proceso en el que se produce una razón. Lo contrario es una forma desvirtuada de lo que es la argumentación, es pelear verbalmente con prejuicios e intenciones ajenas a perfeccionar las ideas, no debe distraerse de lo que está discutiendo con los argumentos, es decir, enfocar bien las razones y los fundamentos que le dan forma a la razón para sostener sus conclusiones, y no en los portadores de la argumentación. Cuando se discute se aportan argumentos, de lo contrario es un alegato estéril para la renovación de las ideas, debemos considerar que los argumentos están en algún marco teórico que los justifica y cuando no hay puentes teóricos entre dos argumentos en una discusión, es inútil pretender hacer versiones compactas o derribar argumentos de un discurso.


En conclusión, el argumento es un modelo Situación-Problema-Solución, una fórmula proposicional, una forma de indagación por cadenas de razones dentro de alguna realidad. Aportar argumentos, es esencial para aprender dentro de un contexto; el texto argumentativo por su naturaleza compromete al escritor con una postura de conclusión, que hace que el lector recree el camino de conocimiento vivido por el escritor. En el acto de argumentar están presentes los estados de verdad (premisas), es decir, proposiciones conectadas por operadores discursivos que forman una expresión lógica que deriva en conclusión. 



Referencias

[1] Kummer, W. (1972). Aspects of a theory of argumentation. En E. GÜLICH, y W. RAIBLE (Eds.), Textsorten, pp. 25-49.

[2] Burns Anne & Coffin, Caroline (2001). Analyzing english in a global context: a reader. Canada: The Open University