Texto académico
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¿La Universidad Valora Más El Aprendizaje De La Habilidad Intelectual, Que Acumular Cantidad De Información Sin Mecanismos Reflexivos Rigurosos Para Su Procesamiento?
La educación en línea debería celebrar el pensamiento
La educación en línea es conversación mediada por literatura. Tratar a la educación como un producto y no como un proceso en el desarrollo intelectual, es el primer paso del fracaso de la educación en línea. El propósito moderno de la educación en línea: conocer lo mejor que se ha pensado y dicho en el mundo; como iniciación de aquellas formas de estilo de pensamiento que se han trasmitido como tradición intelectual a través de los siglos. Esta tradición cualifica al pensamiento crítico, sus dinámicas, valores epistémicos, criterios discursivos, literatura e instrumentos de la expresión de la autonomía racional, como objetivo central de la educación humanista científica.
El punto es que esta orientación a conversar dentro de un estilo de pensamiento científico y literario, se inclina al desarrollo de la habilidad de pensamiento[1]. En cierta medida John Rawls, considera que un estudiante que gana autonomía para gestionar su aprendizaje, está sumando a la educación liberal. El carácter del término “liberal” es relacionado con la libertad académica del profesor y el estudiante, mediada por una tradición intelectual de literatura curricular original.
La justificación del fondo del plan de estudios, argumenta sobre la forma que cierra su discusión, con sus propias palabras, la voz del contenido en la conversación de la comunidad académica que lo respalda[2]. Comprar contenidos para que otros ajenos a la comunidad académica los administren, es el más claro factor de ver a la educación como un producto que en todo es ajeno a la conversación intelectual de su comunidad.
Como seres humanos civilizados, como los herederos, ni de una investigación sobre nosotros mismos y sobre el mundo, ni de un cuerpo acumulado de información, sino de una literatura producto de la conversación, que se lleva a la luz tanto en público como dentro de cada uno de nosotros mismos. Por supuesto que hay argumentos, consultas e información, pero dondequiera que sean rentables deben ser reconocidos como paisajes en esta conversación, y tal vez no sean instructivos sino literatura académica con el sello de: explicar, justificar, demostrar, fundamentar, calcular, narrar. La conversación no es una empresa diseñada para producir un ganador que toma un curso, es una aventura intelectual en la que se ensaya un estilo de pensamiento[3]. La educación en línea, en términos propios, es una iniciación a la habilidad y asociación de la conversación en la que aprendemos a reconocer las voces, distinguir los hábitos del carácter intelectual y moral apropiados para la conversación científica humanista. Y esta conversación, al final, da lugar y carácter a toda la actividad y expresión humana en el espacio digital que demuestra la ocurrencia de aprendizaje.
El conocimiento no es todo de una pieza, sino que viene en formas y voces distintas, con estilos propios de razonamiento y pruebas de verdad; además, es la iniciación al desarrollo intelectual de lo que constituye la mente. Tal iniciación es liberal en la medida en que libera la mente para funcionar sobre el total de la literatura disponible y a ensayar todo tipo de estilos de pensamiento.
Referencias
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[1] Gondim, Elnora & Rodrigues, Osvaldino. (2010). John Rawls: The Political Education. Universitas Humanística. 69. 211-224.
[2] Enslin, Penny. (2006). Are Hirst and Peters Liberal Philosophers of Education?. Journal of Philosophy of Education. 19. 211 - 222. 10.1111/j.1467-9752.1985.tb00091.x.
[3] White, John. (2010). Why General Education? Peters, Hirst and History. Journal of Philosophy of Education. 43. 123 - 141. 10.1111/1467-9752.2009.00718.x.
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Autores:
Eduardo Ochoa Hernández
Nicolás Zamudio Hernández
Gladys Juárez Cisneros
Lizbeth Guadalupe Villalon Magallan
Pedro Gallegos Facio
Gerardo Sánchez Fernández
Rogelio Ochoa Barragán