Texto universitario
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LOS RECTORES
SALVADOR JARA GUERRERO
2011-2014
Sergio García Ávila
Instituto de Investigaciones Históricas
SU VIDA FAMILIAR Y SUS PRIMEROS ESTUDIOS
Salvador Jara Guerrero originario de Morelia, donde vio su primera luz el 14 de octubre de 1955. Hijo del médico José Jara López y Graciela Guerrero. Sus años de infancia transcurrieron felizmente al lado de sus abuelos maternos y de sus padres, ya que cerca de su vivienda se encontraba el Bosque Cuauhtémoc, a donde acudían diariamente los niños y jóvenes para recrearse luego de su estancia en la escuela. Este barrio también le fue muy familiar debido a que era la zona donde se localizaban gran parte de los consultorios médicos y los hospitales de la ciudad, espacio donde regularmente desempeñaba actividades su padre. Parte de sus estudios básicos los llevó a cabo en la escuela primaria "Nueva Galicia" de la capital del país, a donde se trasladó la familia por algún tiempo. Luego de permanecer los primeros años escolares en esta institución, a su retornó a Morelia se inscribió en el "Instituto Valladolid" y dio continuidad a sus estudios. Para ese entonces era una de las escuelas particulares de mayor reputación no sólo en Morelia, sino en el estado; se distinguió por dar espacio a los hijos de los grupos más selectos de Morelia. Una tercera institución de su educación primaria fue la escuela "Miguel Hidalgo", que aun siendo pública era una de las de mayor prestigio de Morelia, por la disciplina que conservaba y su nivel académico. De 1967 a 1970 cursó su instrucción de nivel medio, en la escuela secundaria federal "José María Morelos", conocida como secundaria No. 1 de la misma capital michoacana. Salvador Jara se distinguió por ser buen estudiante; seguramente fue debido a la influencia de su padre, quien era una persona ilustrada.
En el año de 1973 se matriculó en la Escuela de Ciencias Físico Matemáticas de la Universidad Michoacana, carrera profesional que concluyó en 1977. Su trayectoria en la licenciatura fue destacada, por lo que fue considerado uno de los mejores alumnos de su generación. Una vez egresado, comenzó a desarrollar una investigación para obtener su grado de licenciado.
Luego de doce meses de trabajo, el 8 de julio de 1978 presentó a réplica la tesis: La Física en el laboratorio. Algunos de los profesores que influyeron en la formación de Jara Guerrero fueron Jaime Nieto Pérez, quien fue su asesor de tesis de licenciatura, y que a la postre se desempeñaría como secretario académico de la Universidad Michoacana. Encontramos también al maestro Alberto Navarrete López, a quien unos años más tarde sustituyó en la impartición de clases.
Su pasión por la ciencia física, lo llevó a conseguir una beca por parte de la Secretaría de Educación Pública y la Universidad Michoacana, para realizar trabajos de física experimental en la Universidad de Berkeley California, en los Estados Unidos, particularmente en el Laboratorio Avanzado y en el Laboratorio de Mecánica Cuántica.
Durante el primer semestre de 1979 permaneció en dicha institución de educación superior. Todavía para la década de los setenta, en la Universidad Michoacana no se organizaban diversos eventos académicos, motivo por el cual los jóvenes estudiantes tenían que salir a otros lugares del país y del extranjero, para intercambiar experiencias con estudiantes de otras universidades. Fue así como Salvador Jara visitó y conoció el Instituto Politécnico Nacional, la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
Unos meses antes de titularse asistió a un curso de actualización en mecánica y ambientación al mundo de la física, organizado por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, la Sociedad Mexicana de la Física y la Universidad Michoacana. Estas experiencias marcaron la vida del joven físico, le fueron de utilidad en el desempeño de su profesión y en su quehacer dentro de la administración universitaria. Luego de seis años de trabajar como profesor y auxiliar de investigación en la universidad, presentó una solicitud para que se le concedieran de manera definitiva una plaza de Profesor de Carrera, ya que sería una forma de poder acceder a estudios de maestría, y posteriormente reincorporarse a sus actividades docentes dentro de la Universidad sin ninguna dificultad.1
El secretario académico Salvador Jara Guerrero hace entrega de reconocimientos,
(FOTO DE MARCO ANTONIO ARÉVALO).
Luego de realizada su especialidad en la Universidad de Berkeley, en 1993 solicitó un permiso de Año Sabático para iniciar estudios de maestría, los cuales llevó a cabo en el período de 1993 a 1995, dentro del programa de maestría "Filosofía de la Cultura" de la Facultad de Filosofía de la Universidad Michoacana. Aquí se convirtió de nueva cuenta en uno de los alumnos más destacados. Al egresar se dedicó inmediatamente a desarrollar su investigación de tesis para posteriormente a principios de 1997, realizar su examen de grado.
VIDA LABORAL
Cuando aún era estudiante en la escuela de Físico Matemáticas, comenzó a realizar sus primeras prácticas como docente. De 1974 a 1975 fue profesor interino en la Escuela Preparatoria "Rector Hidalgo", donde impartió los cursos de Física I, Física II y Matemáticas I. Al año siguiente ingresó a la planta de profesores de la Universidad Michoacana. Asimismo participó en examen de oposición para competir por la cátedra de Física en la Escuela de Biología. En ese momento el rector de la Universidad era el médico Genovevo Figueroa Zamudio. Para 1980 se desempeñaba como auxiliar de investigación en la Escuela de Físico Matemáticas de la Universidad Michoacana. De manera paralela ingresó a la Escuela de Químico Farmacobiología como profesor por horas. Su actividad como docente se empezó a consolidar en el año de 1981 al concederle el nombramiento de Profesor de Carrera "C", adscrito al Departamento de Física de la División de Ciencias y Humanidades.2 Es menester decir que dentro de sus obligaciones se encontraban las de trabajar exclusivamente para la Universidad Michoacana, cumplir con su carga horaria frente a grupo, y desarrollar las investigaciones pertinentes de acuerdo con el plan de actividades de la Coordinación de Investigación Científica, escribir artículos para su publicación en los órganos de la Universidad Michoacana o alguna otra institución de educación superior. Adquirió el compromiso de redactar un libro, cumplir con las comisiones conferidas por la autoridad superior y asistir a las reuniones académicas a las que fuera convocado. Luego de unos meses de haber recibido el nombramiento, el rector Fernando Iuárez Aranda lo designó subjefe del Departamento de Física de la Unidad de Ciencias, Ingeniería y Humanidades. Jara continuó con sus clases en la Universidad; para 1981 fue profesor de la Escuela de Arquitectura.
Además de sus actividades docentes y la investigación, a principios de los años ochenta, el licenciado Salvador Jara, incursionó en la vida sindical de la Universidad. Dentro del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana ocupó la secretaría de Prensa y Propaganda, función que concluyó en febrero de 1983. Su participación en la administración universitaria se prolongó durante el rectorado del médico Cuauhtémoc Olmedo Ortiz, quien lo nombró jefe del Departamento de Vinculación y Desarrollo.3 Unos meses después ocupó la Secretaría de Difusión Cultural e Intercambio Universitario. Debido a las múltiples actividades que demandaba su función, solicitó un permiso para ausentarse de sus labores como Profesor de Carrera "C", mientras duraba su encargo. Su paso por dicha secretaría se extendió por espacio de dieciocho meses, dejando la titularidad en agosto de 1985. Es importante señalar que por determinación del Departamento Jurídico de la Universidad, este tiempo que permaneció al frente de la secretaría, no se le consideró para integrarlo a su antigüedad.
Desde sus tiempos de estudiante Jara Guerrero se especializó dentro de la enseñanza de la Física, de ahí que al dejar la secretaría de Difusión, presentó ante el Centro de Investigación del Estado de Michoacán (CIDEM), un proyecto para desarrollar la enseñanza de la ciencia y la tecnología en el estado de Michoacán.
Entre otras cosas, fue el responsable de brindar asesoría en la actualización de profesores de preescolar y primaria, a través de conferencias, seminarios y talleres. Para cumplir con este cometido, solicitó un año sabático en la Casa de Hidalgo. Debido al interés que siempre manifestó por la ciencia, a principios de 1986 el rector Raúl Arreola Cortés lo nombró director de la Revista de la Universidad Michoacana. A la par con este encargo, siguió desempeñándose como profesor. Posteriormente en la administración del licenciado Daniel Trujillo Mesina, fue designado secretario administrativo de la Escuela de Ciencias Físico Matemáticas, el 6 de septiembre de 1993.
Luego de haber cumplido satisfactoriamente con esa encomienda, a principios de 1995
participó en la contienda interna para ocupar la dirección de dicha dependencia, ganandolas elecciones y siendo reconocido por el Consejo Universitario a partir del 16 de marzo.
Unos meses antes de concluir su periodo al frente de la dirección, arribó a la rectoría universitaria el licenciado Marco Antonio Aguilar Cortés, quien lo nombró secretario académico de la Universidad Michoacana el 13 de abril de 1999. Ante esa circunstancia y con el propósito de no abandonar su quehacer como docente, se le concedió un permiso sin goce de sueldo para separarse de sus actividades como Profesor Investigador Titular "A" de Tiempo Completo, adscrito a la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas "Matemático Luis Manuel Rivera Gutiérrez". En su lugar se le autorizó continuar laborando como Profesor e Investigador Titular "N' de Medio Tiempo. En ese momento el director de esa facultad era el doctor José Gerardo Tinoco Ruiz.
Después de concluida la gestión del licenciado Aguilar Cortés, Jara regresó a sus actividades normales de docencia. Siendo gobernador de Michoacán Lázaro Cárdenas Batel, se le dio nombramiento de director del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología del Gobierno del Estado, motivo por el cual volvió a solicitar un permiso en la Universidad, para desempeñarse como profesor de medio tiempo. Ya para esas fechas el maestro Jara Guerrero había acumulado experiencia dentro de la administración pública y universitaria, situación que seguramente influyó para que durante la rectoría de la doctora Silvia Ma. Concepción Figueroa se le distinguiera con el cargo de secretario general, a partir del 15 de enero de 2007.
Segunda Olimpiada Estatal de Fisica. (FOTO DE MARCO ANTONIO ARÉVALO).
Durante ese período alcanzó el nombramiento de Profesor e Investigador Titular "B" de Tiempo Completo, cuya constancia oficial data del 10 de noviembre de 2010. Posteriormente, alcanzó la categoría de Profesor e Investigador Titular "C" de Tiempo Completo, adscrito a la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas. La labor desempeñada con esa categoría, lo llevó a ser miembro del Sistema Nacional de Investigadores y obtener el reconocimiento de Perfil Promep Deseable. Además participó en seminarios, talleres, coloquios y congresos tanto a nivel local y nacional como internacional, además de impartir en diversas instituciones de educación superior y dentro de la Universidad Michoacana, múltiples conferencias sobre temas relativos a la educación y la filosofía. De igual manera fue 613 profesor visitante en el World Collage West en Estados Unidos de Norteamérica, así como en las universidades de Roma "La Sapienza" y de Mesina, en Italia, y la Autónoma de Barcelona en España. No menos importante es la publicación de más de cincuenta artículos en revistas especializadas y artículos de divulgación científica, lo mismo que diez libros individuales. En el año 2004 se hizo acreedor al primer lugar en el Concurso Latinoamericano de Cuento de Ciencia Ficción, organizado por Aleph Zero, con el cuento: Ayer soñé un teléfono. Formó parte de varios organismos evaluadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyr) y de la Secretaría de Educación Pública.
Toma de posesión del Dr. Salvador Jara como rector, acompañado del presidente y secretario de la Comisión de Rectoría, (FOTO DE MARCO ANTONIO ARÉVALO).
SU GESTIÓN AL FRENTE DE LA RECTORÍA
Una vez que la doctora Silvia Figueroa concluyó su administración, le sucedió el doctor Salvador Jara Guerrero, quien asumió el cargo el 9 de enero de 2011. Una de las novedades ocurridas durante su administración fue el surgimiento de la Gaceta Nicolaita, órgano de difusión de la Universidad Michoacana. Este fue uno de los aciertos, ya que a través de ese periódico, la comunidad se enteraba de lo que se hacía en las dependencias universitarias, información que anteriormente no llegaba a la gran mayoría.
Al ser la Universidad una institución donde se imparte la enseñanza media superior, hubo preocupación por formar estudiantes con alto nivel académico; considerando que esos jóvenes posteriormente nutrirían a los distintos programas de licenciatura. Para ello, se procuró un mejor equipamiento mediante la adquisición de proyectores multimedia y computadoras portátiles, que se distribuyeron de manera equitativa en las cinco escuelas de preparatoria de Morelia y en las dos de Uruapan. No menos importante fue la modernización de los laboratorios de física y química, que fueron dotados de paquetes de micro escala. Al ser la comunidad del bachillerato una de las más vulnerables respecto a la seguridad, el gobierno universitario central se preocupó de alcanzar medidas más eficientes, con el fin de resguardar la integridad física de los profesores y alumnos, así como sus bienes. Fue así como se creó el Programa Institucional de Seguridad Universitaria, a través del cual se instalaron 70 cámaras de vigilancia, con un valor total aproximado de cuatro millones de pesos. A fin de establecer una mejor vinculación entre el nivel bachillerato, las licenciaturas y los posgrados, se implementó también el ciclo: Miércoles de la ciencia en el Bachillerato, donde destacados catedráticos e investigadores impartían pláticas y conferencias a los alumnos de las preparatorias, sobre diversas temáticas científicas. Este proyecto se diseñó desde la Coordinación de Investigación Científica, presidida por el doctor Luis Manuel Villaseñor Cendejas.4 No sólo los alumnos fueron motivo de atención, sino también los profesores quienes se integraron al diplomado del Programa de Formación Docente de Educación Media Superior, promovido por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUlES). Este programa permitió a los profesores del bachillerato gozar de beneficios como: adquirir la capacidad pedagógica para impartir los programas de estudio bajo el enfoque de competencias; coadyuvar en el mejoramiento del perfil académico de los estudiantes y participar en el proceso de promoción.
Otra de las ocupaciones sustantivas de su administración, fue dar continuidad a la labor iniciada con la doctora Silvia Figueroa Zamudio, de acreditar los programas educativos. En los poco más de tres años que estuvo al frente de la Universidad, 46 programas, de un total de 62 en funcionamiento, estaban registrados en el Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC), lo que representaba un 74.2%, tres de ellos a nivel de competencia internacional. Atendiendo a las necesidades sociales y a una política de la federación, se crearon tres nuevos programas: las maestrías en Ciencias en Ecología Integrativa y en diseño Avanzado, así como el doctorado en Administración. Dentro de esa misma ampliación de la oferta académica, se continuó con el establecimiento de escuelas a distancia por varias partes del interior del estado. Para finales de 2013 se inauguró la de Tlalpujahua, con lo que sumaban siete los espacios de ese tipo.
Respecto a la reforma integral de la Universidad, el doctor Jara Guerrero incentivó el quehacer del Consejo Universitario, para adecuar aquellos planes de estudio que así lo ameritaran. Fue así como se hicieron 11 reformas a planes de estudio de cinco facultades y 2 institutos; se aprobaron siete reglamentos y se hicieron reformas a dos más. Destacaron las modificaciones al Reglamento del Tribunal Universitario y al General de Exámenes. De igual manera se aprobó el Manual de Operaciones del módulo de Becas Pronabes, mediante el cual se vieron beneficiados los alumnos que necesitaban una beca para continuar con sus estudios.
Todo este arduo trabajo reglamentario, se hizo extensivo al Proceso de Auscultación, Elección y Permanencia de Directores de Dependencias Universitarias, al Reglamento de Uso para Auditorios, al de Control de Parque Vehicular, al Manual de Procedimientos para Atender la Suspensión Injustificada de Labores en las Dependencias de la Universidad Michoacana.
De no menor trascendencia fue la atención puesta en la investigación y la divulgación científica. Anualmente se promovieron entre 480 y 500 proyectos de investigación, en los que se ejercieron alrededor de $40,000.000.00. De éstos, treinta fueron aprobados por el Consejo Universitario y diez adicionales se obtuvieron, por las gestiones que se realizaron ante diversas instancias estatales y federales. Además hubo 50 proyectos que se llevaron a cabo en conjunto con otras instituciones. Se fortaleció la vinculación interinstitucional con el sector productivo público y privado, cumpliendo así una parte del compromiso social que tiene la Universidad. En ese sentido, se firmó un acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), para impulsar trabajo comunitario a través del programa: "Sin Hambre, Cruzada Nacional". Lo propio ocurrió con la Secretaría de Desarrollo Rural del Estado (SEDRU) y la Secretaría de Agricultura y Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA). Todo este quehacer se reflejó en 90 investigaciones realizadas, entre las que se destacaron la consolidación de granjas integrales de cabras productoras de leche y carne, en diez municipios del estado; desarrollo de un sistema integrado de tratamiento y reúso de agua, para la producción y conservación de peces; uso de hábitat, abundancia y distribución potencial de las especies prioritarias de aves de la reserva de la biosfera mariposa monarca.
Mención especial merece la creación del Centro Mexicano de Innovación en Energía Geotérmica, que con elliderazgo nicolaita logró reunir a más de treinta instituciones y empresas de reconocimiento nacional e internacional, para concursar un fondo histórico que se aplicaría en la investigación en México. En este programa la Universidad Michoacana ejecutaría directamente 16 proyectos, encabezados por igual número de investigadores titulares y más de 30 investigadores pertenecientes al Sistema Nacional de Investigadores (SNI). Por medio de la Facultad de Ingeniería Mecánica, se diseñó el proyecto para construir un aerogenerador en la Costa de Michoacán, que ponía al alcance de las comunidades de la región, una tecnología de generación de energía, de bajo impacto para el ambiente y a precios accesibles. De manera complementaria, se formó la Red de Revistas de la Universidad Michoacana, con la finalidad de difundir la investigación. Asimismo, la universidad se posicionó en el décimo lugar del ranking Scimago, por el número y calidad de las publicaciones científicas de sus investigadores.
Al impulso a la investigación y la generación de nuevo conocimiento, se agregó la difusión de la cultura, particularmente la nicolaita. La secretaría de Difusión y Extensión Universitaria, se dio a la tarea de organizar una serie de eventos musicales, de teatro, muestras de cine y danza, donde se contó con la participación de grupos artísticos de México y otros países. Se le dieron nuevos bríos al Centro de Estudios Sobre la Cultura Nicolaita, dependencia que se fortaleció con su fusión con el Archivo Histórico, y que se dio a la tarea de dar seguimiento al Seminario Nacional de Historia de la Universidad y de la Educación, que en el 2014 cumplió su décima sexta edición de manera ininterrumpida. Siendo de los pocos seminarios que a nivel nacional se han sostenido por más de una década y media.
El mejoramiento de los programas y el impulso al desarrollo de la investigación, no fueron posibles sin la continua preparación del personal académico. Durante esta administración el 80% de los profesores de Tiempo Completo (1085) logró contar con estudios de posgrado, muchos a través del Programa del Mejoramiento del Profesorado (PROMEP). Con el fin de estimular a los docentes, se brindó más apoyo económico al Programa de Estímulos al Desempeño del Personal Docente (ESDEPED), que anualmente benefició a casi 600 profesores, lo que significó un 10% más, en relación a la administración anterior. En el 2013 se alcanzó un cifra record de profesores con Perfil Deseable Promep, 530, muy por encima de los 439 de ciclos anteriores.5
Inauguración de la Coordinación de posgrado.
(FOTO DE MARCO ANTONIO ARÉVALO).
El Dr. Salvador Jara con la Banda de Guerra Universitaria en Ario de Rosales,
(FOTO DE MARCO ANTONIO ARÉVALO).
Los alumnos no se quedaron al margen de la atención universitaria. Con la finalidad de contar con una fuente de detección temprana de riesgos, que pudieran afectar la trayectoria escolar de los estudiantes, se diseñó e instrumentó la aplicación de la encuesta Perfil de Ingreso y Expectativas Educativas para el Nivel Medio Superior. Se dio Particular importancia a la Responsabilidad Social Universitaria (RSU), donde se contó precisamente con la participación de los jóvenes. Además la Universidad destinó recursos por $175,000.00 anuales para aplicar en los diferentes esquemas de movilidad estudiantil, a nivel nacional e internacional. En este mismo renglón, con el objetivo de facilitar e incentivar la vinculación de la comunidad estudiantil, con instancias nacionales e internacionales de educación superior, se puso en marcha la Oficina de Asuntos Internacionales, con la misión de atender las solicitudes de movilidad a través de los convenios establecidos.
Mención aparte merece la aplicación del Examen General de Egreso de licenciatura, que aunque muy controvertido entre la comunidad, se aplicó anualmente a cerca de los 7,500 estudiantes egresados de la universidad. En relación al posgrado, también anualmente alrededor de 1,300 muchachos se vieron beneficiados con becas otorgadas por el CONACy'T, alcanzado un promedio anual de 40 nuevos doctores en todos los programas.
La administración de Jara, se caracterizó por seguir una política de diálogo y entendimiento con las organizaciones sindicales universitarias, pero al mismo tiempo tratando de poner orden en algunos aspectos y contener los excesos de sus agremiado s, sobre todo de los trabajadores administrativos. Uno de los episodios más sonados sucedió con la jubilación del líder nato del Sindicato Único de Empleados de la Universidad Michoacana, licenciado Eduardo Tena Flores, que no sólo causó novedad en esa Casa de Estudios, sino que debilitó de manera importante a dicha organización. De igual manera, en el sector estudiantil se hicieron esfuerzos encaminados a que, los moradores de los albergues aceptaran conducirse a través del reglamento diseñado desde el Consejo Universitario. De no menor trascendencia, fue la implementación de un proyecto encaminado a ordenar el ingreso de los estudiantes a la universidad, en aras de terminar con una vieja costumbre, de toma de las instalaciones universitarias, como medida de presión para acceder a las diferentes escuelas y facultades.
OTRAS ACTIVIDADES LABORALES
El 20 de junio de 2014, ante la renuncia del licenciado Fausto Vallejo Figueroa, el congreso del estado, con 38 votos a favor y dos abstenciones designó a Jara Guerrero, gobernador sustituto del Estado de Michoacán de Ocampo, para complementar el periodo que fenecía en 2015. Fue así como el nuevo rector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, el doctor José Gerardo Tinaco Ruiz, el 23 de junio del 2014 le concedió un permiso para ausentarse de sus labores como Profesor e Investigador Titular "C" de Tiempo Completo. A partir de entonces dejó de impartir cátedra frente a grupo, ya que anteriormente, aunque había sido funcionario en distintas ocasiones, parte de su tiempo lo continuó dedicando a la enseñanza universitaria. Es importante decir que los legisladores de Michoacán optaron por su nombramiento, argumentando que Jara Guerrero era un académico de reconocido prestigio, que no tenía nexos con el crimen organizado, ni tampoco militaba en ningún partido político. Además, en la designación del nuevo gobernador influyó de manera importante, el también nicolaita y ex rector Salvador Galván Infante, quien ante los representantes de los demás partidos políticos hizo la propuesta formal. Para ese entonces el ingeniero Alfonso Martínez, era el presidente del Congreso Local, y más tarde ganaría las elecciones para presidente municipal de Morelia. La gestión como gobernador fue difícil por las condiciones que guardaba Michoacán desde años anteriores, en donde se generó una gran inestabilidad e incertidumbre, con motivo de la precaria salud del licenciado Fausto Vallejo Figueroa, del protagonismo de los grupos del crimen organizado y la presencia de las autodefensas comunitarias. En ese sentido una de sus tareas fue conducir con el mayor orden posible los comicios para elegir al gobernador definitivo y constitucional de Michoacán. Naturalmente que desde esa responsabilidad, brindó apoyo económico a la Casa de Hidalgo, que ya venía padeciendo una crisis financiera.
El Dr. Salvador Jara en la Unidad Profesional del Balsas en Huetamo,
(FOTO DE MARCO ANTONIO ARÉVALO).
El día último de septiembre de 2015 concluyó su periodo al frente del gobierno estatal, sin embargo fue hasta el mes de febrero del año siguiente cuando volvió a reincorporarse a la Universidad Michoacana. Inmediatamente solicitó licencia pre jubilatoria por tres meses, con el fin de realizar todos los trámites de su jubilación definitiva. En tanto el Consejo Universitario resolvía dicha situación, el 20 de octubre de 2015 el titular del Ejecutivo Federal, Enrique Peña Nieto, le concedió el nombramiento de subsecretario de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública, presidida ésta por el doctor Aurelio Nuño Mayer, quien también simpatizaba con Jara Guerrero. Finalmente, el 23 de noviembre de 2015, el rector Medardo Serna González le informó que el Consejo Universitario había aprobado su jubilación. De los 37 años de servicio a la Universidad, 18 años siete meses correspondieron a sus tareas de funcionario.
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1 Archivo General de la Universidad Michoacana. (AGUM), Fondo: Secretaria Administrativa, Sección: Personal Universitario, Serie: Docentes y Administrativos, Exp. 1636, 17 de noviembre de 1980 s/f.
2 AGUM, Fondo: Secretaría Administrativa, Sección: Personal Universitario, Serie: Docentes y Administrativos, Exp. 1636, 27 de marzo de 1981.
3 AGUM, Fondo: Secretaría Administrativa, Sección: Personal universitario, Serie: Docentes y Administrativos, Exp. 1636. 14 de marzo de 1984.
4 Tercer informe de actividades. Dr. Salvador Jara Guerrero. Rector. p. 11.
5 Tercer informe de actividades. Dr. Salvador Jara Guerrero. Rector. p. 25.